Tener un equipo con la moral baja es un camino seguro al fracaso empresarial. Los vendedores son uno de los puntales de cualquier negocio, por eso la importancia de tenerlos siempre al 100% de rendimiento. Hoy te enseñamos cómo motivar a un equipo de trabajo o de ventas con algunas de las técnicas que usan las empresas más punteras.
¿Cómo motivar a un equipo de trabajo?
Las personas están motivadas por una gran variedad de cosas. Puede ser difícil para los empresarios crear un entorno que funcione para todos. Hay que tener en cuenta las personalidades individuales. La mayoría de la gente está motivada por las dos más fuertes emociones humanas: el miedo y el deseo.
¡Incentiva, incentiva! Los incentivos de pago, por lo general en forma de comisiones y bonificaciones, son un factor importante para motivar a un equipo de ventas. Sin embargo, el apoyo y el reconocimiento también son vitales. Las palmaditas públicas en la espalda pueden ser buenas para la moral.
Crea un ambiente de ventas. Hay cinco cosas que se recomiendan para crear un ambiente propicio para las ventas:
- Dar una dirección clara. Asegúrate de que todo el mundo sabe adónde se dirigen y de que están alineados en esa dirección.
- Asegurarse de que los miembros del equipo tienen las habilidades y recursos para poder alcanzar esas metas.
- Asegurarse de que los miembros del son disciplinados en el desempeño de su trabajo.
- Conocer sus principales amenazas y tener planes de contingencias si las cosas no están funcionando.
- Saber lo que motiva a cada miembro del equipo con el fin de obtener el máximo provecho de ello.
Arremángate. De vez en cuando es bueno que el CEO baje a las trincheras y lance a vender junto con su equipo. Sin duda esto va a motivar a su equipo de trabajo y ayudará a llevar las ventas al siguiente nivel.
Comunícate con tu equipo de ventas. Aparte de lo que decíamos de bajar a las trincheras de vez en cuando, hay que mantenerse inmerso en el proceso de ventas y las luchas del día a día. Es difícil ser empático, llevar a tu equipo en la buena dirección, y tomar decisiones estratégicas sin información crítica sobre lo que está ocurriendo sobre el terreno.
Recuerda, aprender cómo motivar a un equipo de ventas marca la diferencia entre una empresa exitosa y una empresa ruinosa.